Hogares Compartidos es un programa de acompañamiento social en viviendas supervisadas para personas mayores con escasos recursos económicos. Lleva desarrollando su labor en Valencia desde el año 2014. La entidad crea grupos de convivencia estables y colaborativos para que las personas puedan sentirse acompañadas y apoyadas. Los pisos son alquilados por la asociación que aporta la fianza y luego los 4 participantes son los arrendatarios de la vivienda. Se firman unas normas básicas de convivencia y se les da la libertad de que sean los propios mayores los que organicen su día a día, potenciando su autonomía. Los gastos de suministros son pagados a partes iguales por todos los componentes del hogar. La entidad fomenta el envejecimiento activo realizando actividades de ocio grupales e individuales atendiendo a las inquietudes particulares de cada mayor. Por otro lado potenciamos la participación de la ciudadanía a través del voluntariado. El tipo de voluntariado es muy variado desde el apoyo afectivo, supervisión semanal de la convivencia y estado del hogar, "manitas" que apoyan en el mantenimiento de los hogares o profesionales que ofrecen sus conocimientos para la mejora del proyecto en todos los sentidos (contabilidad, comunicación, administración, salud...). La entidad está en búsqueda constante de pisos en Valencia ciudad para alquilar a un precio solidario... si puedes ayudarles contacta con ellos en www.hogarescompartidos.org o en el email info@hogarescompartidos.org

Hogares Compartidos ofrece un programa innovador de alojamiento y acompañamiento social en viviendas supervisadas para mayores con escasos recursos económicos. La intervención se centra en la creación de unidades de convivencia de 4 personas donde se establece un diseño de procesos por fases (recepción y selección de los participantes, alquiler de viviendas, período de prueba tras la entrada al hogar; diseño de la intervención, la estructuración de la vida cotidiana, seguimiento profesional y evaluación). La perspectiva de intervención parte del enfoque de capacidades y deseos de las personas mayores, es decir, del respeto por sus costumbres y rutinas, facilitando su independencia, libertad y autonomía; sin olvidar la defensa de su valor en la sociedad así como su participación en ella. Aplicamos la perspectiva educativa basada en lo cotidiano, que parte del aprovechamiento de las situaciones del día a día generados en la cotidianidad del hogar, así como la perspectiva intergeneracional al crear una línea de voluntariado “afectivo” con la participación de personas jóvenes. La participación en el programa es voluntaria y se plantea como un recurso a largo plazo, finalista. Hogares Compartidos ofrece a los mayores habitaciones individuales, siendo imprescindible que todos los inmuebles cuenten con ascensor.

Una consideración de relevancia, es que el nombre de la entidad que crea el proyecto “Hogares Compartidos” y no “pisos compartidos” no es aleatorio, ya que lo que se pretende en el trasfondo y en la medida de lo posible es una convivencia real y no un mero compartir piso. Por lo que los participantes del programa han de tener una actitud positiva hacia la convivencia.

El proyecto plantea un recurso cercano, flexible y adaptado a las necesidades de las personas donde se trabaje en red con el resto de agentes sociosanitarios (centros municipales de servicios sociales, unidades de trabajo social de hospitales y centros de salud, CAST, albergues, comedores sociales...) que son los principales preescriptores del recurso. Por otro lado la entidad también se coordina con recursos de ocio (CEAM, Cotlas, Fundación AGM, Fundación Proyecto Senior, Culturarte…) para incentivar el envejecimiento activo de los mayores.

Los participantes firman unas normas básicas de convivencia básicas, pero decidirán sobre como organizarse en su día a día. Los mayores aportarán aproximadamente el 35% de su pensión como cuota de participación el programa y asumirán a partes iguales los gastos de suministros que previamente habrán sido abonados por la asociación, que se establece como mediadora en el contrato de arrendamiento entre el propietario y los inquilinos asegurando el pago del alquiler y suministros así como el mantenimiento de la vivienda y la aportación de la fianza inicial.

El programa de acompañamiento social consiste principalmente en el seguimiento de la convivencia por parte de profesionales y voluntarios que velará por tranquilidad de los participantes, la información de los recursos a su alcance, el asesoramiento y apoyo en trámites, incentivar el envejecimiento activo, acompañamientos físicos a médicos u otros, la creación del sentimiento de pertenencia al grupo y el apoyo afectivo, todo ello son los pilares del proyecto. En lo que concierne a la evaluación se medirán cuestiones como: la calidad en la provisión de servicios, la satisfacción de los beneficiarios del proyecto, la evaluación del funcionamiento de la convivencia en los hogares, las actividades y procesos del proyecto y la evolución del impacto.